Dijeron que no habría urnas. Que no habría papeletas. Que no habría campaña electoral. Que no habría páginas web. Que no habría centros de votación. Que no habría censo electoral. Que no habría votantes. Que no había sido un referéndum. Que no fue nada. Pero hubo urnas. Y papeletas. Y campaña electoral. Y páginas web. Y centros de votación. Y censo universal. Y dos millones de votantes. Y una demostración de fuerza, auto-organización y poder popular que no se veía en décadas. Porque el referéndum del 1 de octubre de 2017 lo hizo el pueblo para el pueblo. Y la fuerza de un pueblo empoderado, determinado y unido es imparable. Porque sólo el pueblo salva al pueblo.
1 de octubre, ni olvido ni perdón!
1 de octubre, PODER POPULAR!
