La LGTBfobia es fascismo. Son innumerables las personas LGTB que han sido agredidas y víctimas del odio, incluso asesinadas, por personas y grupos de extrema derecha en todo el mundo. Como Daniel Zamudio, quien fue brutalmente torturado en 2012 en Chile por un grupo de neonazis y murió semanas después.
Es por ello que desde La Sandino creemos esencial crear sinergias entre la lucha antifascista y el activismo LGTB para defender unos barrios libres de LGTBfobia y de fascismo. Porque no se entiende un antifascismo que no está al lado de la lucha por los derechos de las personas LGTB. Porque hay un enemigo común: se llama fascismo, se llama extrema derecha, se llama discurso de odio. Y sólo uniendo fuerzas lo podremos detener, desmontando sus discursos y haciéndole frente en las calles. Porque no nos podemos permitir que la extrema derecha llegue a nuestros gobiernos para decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas. Porque no nos podemos permitir que la extrema derecha se apodere de nuestras calles para llenarlas de odio. Porque no podemos ceder ni un milímetro ante el fascismo. Porque somos aliadas, somos compañeras de trinchera, porque juntas somos más fuertes.
Los derechos LGTB son derechos humanos. Antifascistas siempre!
